Errores comunes al elegir una junta tórica
Seleccionar una junta tórica incorrecta puede tener consecuencias graves en el rendimiento y la durabilidad del sistema en el que se instala. A continuación, desglosamos algunos de los errores más comunes al elegir una junta tórica “incorrecta” y las posibles repercusiones de cada uno.
Medida más pequeña de lo necesario
- Pérdida de estanqueidad: La junta tórica no llenará adecuadamente el espacio diseñado para ella, resultando en fugas de líquidos o gases.
- Excesiva tensión: La junta estará sometida a una tensión excesiva, lo que puede causar deformaciones, cortes o roturas prematuras.
- Dificultad de instalación: Puede ser más difícil de instalar, y al intentar estirarla, se corre el riesgo de dañarla.
Medida más grande de lo necesario
- Compresión excesiva: La junta tórica será comprimida en exceso cuando se instale, lo que puede causar deformaciones y desgaste acelerado.
- Distorsión o extrusión de la junta: La compresión desigual puede llevar a una pérdida de estanqueidad, permitiendo fugas.
- Daño a los componentes: La presión excesiva ejercida por la junta tórica puede dañar los componentes del sistema, como ranuras y canales.
Material no adecuado
- Degradación química: El material de la junta tórica puede reaccionar químicamente con el fluido o gas, causando su degradación y pérdida de estanqueidad.
- Fallo térmico: Un material no adecuado puede no soportar las temperaturas operativas, lo que puede llevar a su endurecimiento, ablandamiento o incluso fusión.
Dureza más alta de lo necesario
- Falta de conformidad: Una dureza excesiva puede impedir que la junta se conforme adecuadamente a las superficies de sellado, resultando en una estanqueidad deficiente.
- Desgaste prematuro: Una junta muy dura puede desgastarse más rápidamente en aplicaciones de baja presión o con tolerancias menos precisas.
Dureza más baja de lo necesario
- Deformación: Una junta demasiado blanda puede deformarse bajo presión, lo que puede comprometer la estanqueidad.
- Desgaste acelerado: En aplicaciones de alta presión o abrasivas, una junta de baja dureza puede desgastarse rápidamente.
No cumplir con las homologaciones necesarias
- (GAS) Fugas peligrosas: La junta puede no ser resistente a los gases específicos, lo que puede resultar en fugas y potenciales riesgos de explosión o intoxicación.
- (GAS) Fallo regulatorio: No cumplir con las homologaciones puede resultar en multas, sanciones y retirada de productos del mercado.
- (AGUA POTABLE) Contaminación: Materiales no certificados pueden liberar sustancias tóxicas o impurezas en el agua potable, comprometiendo la salud de los consumidores.
- (AGUA POTABLE) Problemas Legales: No cumplir con las homologaciones puede llevar a sanciones legales y pérdida de confianza por parte de los clientes.
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